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shellgame Espero que disfruteis de la lectura de la traducción que he hecho del "Sharp and flat" de John Nevil Maskelyne.

He liberado también todo el apartado de técnicas cartomágicas. Proximamente liberaré otras lecturas igual de interesantes para que continúeis profundizando en este apasionante mundo de la cartomagia y del tahurismo. Un abrazo.

                                                                      Antonio.

 

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Con este título se conoce una rutina cartomágica creada a partir de un problema planteado por Edward Marlo, aunque parece ser que la idea es original de Paul Curry, quién publicó en 1955 en The Cardician su versión de "Predicción abierta". En 1952 el legendario cartómago canadiense Stewart James creó el efecto tras la convención mágica celebrada en Colon, donde su amigo Francis Haxton le planteó el problema que Edward Marlo le propuso en una visita a Inglaterra.

Efecto: el mago hace una predicción abierta nombrando o escribiendo el nombre de una carta en un trozo de papel, por ejemplo, el siete de corazones. El espectador da cartas lentamente una a una, sobre la mesa caras arriba. En un momento dado, deja uno de los naipes cara abajo y continúa dejando cartas caras arriba hasta acabar la baraja. Se hace notar por el mago que entre las 51 cartas caras arriba no se encuentra la que se corresponde con la predicción hecha antes de empezar el juego. El espectador vuelve cara arriba la única carta cara abajo comprobándose que coincide con la predicción abierta del mago al inicio de la rutina.

Este efecto está rodeado de misterio, ya que las condiciones propuestas por Stewart James en una carta al editor de la revista Ibidem, Howard Lyon, parecen insalvables. Un extracto de esta carta dice lo siguiente:

"Puede usarse una baraja prestada, no siendo necesario una nueva, podrían incluso faltarle algunos naipes no siendo necesario saber cuántos o cuales, sólo se necesita tener la seguridad de que la carta predicha se encuentra en la baraja. No se necesita montar nada o hacer maniobras ocultas de ningún tipo, la baraja permanece siempre a la vista del público. No es necesario robar o empalmar carta alguna. El material de escritura también puede ser prestado, la predicción se hace en el momento en el que se escribe y no es otra cosa que el valor y palo de una carta. Esta es revelada y conocida por el público antes de que la primera carta cara arriba sea dada por el espectador. No existen efectos alternativos u otras intenciones, el efecto es estrictamente improntu, nada más que los artículos prestados. Cuando comienza el reparto de cartas, el mago desconoce donde se encuentra la carta predicha o cuándo el espectador dejará una carta cara abajo hasta que no lo haya hecho".

Como se puede observar las condiciones impuestas por Stewart James son difíciles de sortear, este hecho ha contribuido a la leyenda de esta rutina cartomágica a la que numerosos cartómagos han dedicado tiempo y esfuerzo durante más de cincuenta años tratando de buscar una solución a las condiciones impuestas. Aunque se cree que la solución a Fifty-one faces north nunca fue publicada por Stewart James se pasa por alto el hecho de que el número 3 de la revista Ibidem contiene una rutina semejante, listado como solución número 8, cumpliéndose tal vez la máxima de que el mejor método de guardar un secreto es publicándolo.

Este método fue propuesto por Stewart James en la revista Ibidem entre otros muchos métodos para resolver el problema, tal vez haya sido pasado por alto por los cartómagos debido a que no es explicado tan exhaustivamente como sus predecesores.

Método:

  1. Coger cualquier baraja mezclada por el espectador y secretamente mediante la técnica de vistazo que creamos oportuno echar un vistazo a la carta superior. Esta será la carta con la que haremos la predicción, podemos nombrarla directamente o escribirlo en un trozo de papel que dejamos a la vista del público. Supongamos que se trata del siete de corazones.
  2. La baraja se encuentra cara abajo en la palma de la mano izquierda, desde aquí la cogemos con la mano derecha en posición de cortar, dedo pulgar en el extremo corto interior, dedo índice sobre el lomo de la baraja y resto de dedos en el extremo corto exterior. Aplicando un aligera presión con el dedo índice derecho al tiempo que tiramos con el resto de dedos levemente hacia arriba se dejan caer cartas de la mano derecha a la izquierda, pidiendo al espectador nos diga alto cuando lo desee.
  3. Una vez nos pare, se levanta la mano derecha y se muestra la carta del fondo del paquete de la mano derecha al espectador, quién debe recordarla, esta carta es la carta en la que el espectador deberá parar.
  4. Unir ambas mitades de la baraja, pero al hacerlo hacer pasar la carta inferior de la mano derecha al fondo de la baraja de la siguiente manera: Al bajar la mano derecha para colocar su media baraja sobre la de la izquierda, los dedos medio y anular derechos hacen girar la carta inferior hacia la derecha, al mismo tiempo se apoyan sobre el ángulo exterior derecho haciendo que la parte interna de la carta cree una amplia apertura por su parte interior. La media baraja de la mano izquierda se introduce entre esta apertura creada por la última carta del paquete de la mano derecha. La acción queda cubierta por la mano derecha, para el público sólo se ha recompuesto la baraja, cuando en realidad la última carta del paquete de la mano derecha ha pasado a ser la carta inferior de la baraja cuando en realidad debiera estar en el centro de la misma.
  5. Tras los pasos anteriores la situación es que la carta de la predicción se encuentra en la parte superior de la baraja, mientras que la carta vista al azar por el espectador se encuentra en el fondo de la misma. Se realiza el corte Charlier a una mano, con lo que ambas cartas se reúnen en el centro de la baraja, quedando la carta vista por el espectador sobre la carta predicha estando la baraja cara abajo.
  6. Se entrega la baraja al espectador, y se le pide que efectúe dos cortes seguidos de la baraja, con esto la situación quedará como antes de efectuarlos, es decir con ambas cartas reunidas en el centro de la baraja aproximadamente. Se instruye al espectador diciéndole: " quiero que des lentamente una a una, cartas caras arriba en una pila sobre la mesa. Cuando veas tu carta, quiero que pares y des la siguiente carta cara abajo, ¿entendido?".
  7. El espectador comienza a dar cartas una a una, cara arriba, cuando ve su carta deja cara abajo la siguiente. En este punto el mago comenta: "Que extraño todavía no hemos visto el siete de corazones, continúa". El espectador continúa dando cartas una a una, cara arriba sobre la pila hasta acabar con la baraja. El espectador cuadra la baraja y la extiende sobre la mesa. viéndose claramente que entre todas las cartas cara arriba sólo existe una cara abajo, la saca de la extensión y la vuelve cara arriba, coincidiendo con la predicción del cartómago.

Como se comprende fácilmente el efecto se basa en un método simple, la carta guía, de la que el mago no necesita saber su identidad.